Hasta hace no muchos años, la «eficiencia operativa» se veía como un simple método para incrementar el margen de beneficio de una empresa. En pleno 2016, supone un requisito indispensable para la supervivencia de la empresa (o de un modelo de negocio). La «eficiencia operativa» consiste en ofrecer los bienes y servicios a los clientes de la manera más rentable posible, sin dejar por ello de garantizar la alta calidad de dichos bienes o servicios. Desde luego las TI son uno de los habilitadores —junto con la optimización de procesos— de las iniciativas de «eficiencia operativa» del negocio.
El departamento de TI lo sabe —y lo supo—. Primero se alineaban, luego se sincronizaban con los objetivos estratégicos de la empresa. Sin embargo, hoy las empresas deben buscar una relación de convergencia entre negocio y tecnología, es decir, ya basta con que exista las «TI de la empresa», entendidas como «departamento» o «área», sino que al estar TI en todas las áreas de la empresa, influye en «todos» los procesos.
Aunque «organizativamente» exista una Dirección de TI que coordine los esfuerzos, ofrezca los servicios TI a las demás áreas, implementando sistemas, soporte al usuario. Hoy debe existir «usuarios expertos en TI» en cada área y serán ellos los que se encargan de buscar la eficiencia operativa.
El servicio de consultoría consiste en:
- Participar en la definición de la estrategias en las áreas para identificar hitos en donde TI puede intervenir para hacer más eficiente un proceso.
- Preparar la propuesta de actividades y el presupuesto.
- Nos encargamos que el cliente consiga los resultados de negocio esperados.
- Somos ese «usuario experto en TI» que hoy se necesita.
Más información: servicios@stigou.com